El verano: tiempo de relajación, de playa y terrazas, de siestas y… catalogación de fotos. Por estas fechas, hace la friolera de seis años, comentaba que casi había terminado de organizar mi fotos en un catálogo. Aquel ‘casi’ no desapareció hasta hace unas semanas, cuando por fin terminé de clasificar las fotos de 2008 y añadí todas las que vinieron después. En todo ese tiempo han pasado unas cosas:

Cambio de software

El programa que empleaba, iView Pro, dejó de existir como tal al ser comprado por Microsoft que pasó a denominarlo Expression Media. Tras algunas actualizaciones se deshizo de él, vendiéndolo a Phase One, llamándose desde entonces (Phase One) Media Pro. Podría haber seguido usándolo ya que el programa era en esencia el mismo y, por tanto, totalmente compatible, pero algunos cambios (el diseño que fue a peor), el estancamiento de las actualizaciones y el uso de Lightroom (LR)  fueron suficientes para cambiar a este último programa. Media Pro quizás sea más potente en algunos aspectos, pero la integración y facilidad de uso de los distintos módulos de Lightroom fueron decisivas para elegirlo frente a otras interesantes alternativas como Daminion.

Este cambio de software presenta la problemática de que los datos almacenados no son completamente exportables y utilizables por otros programas. Algunos de los campos de Expression Media como el de ‘Personas’ no existe como tal en LR. Existen algunos scripts hechos por particulares que permiten salvar algunos de estos escollos, pero aún así la migración es una tarea ardua.

Otro dificultad es que, habiendo pasado tanto tiempo, la forma de catalogar cambia, ya sea por aplicar nuevos criterios que se consideran mejores, o porque no se recuerda la forma anterior de hacerlo (p.e. los nombres exactos que se han usado como palabras clave para identificar personas)

La puesta al día

Así que una vez actualizados los datos anteriores, quedaban por introducir 6 años y lo que llevábamos de este. Mi forma de trabajar ha sido la siguiente:

  1. Importar las fotos a LR. En ese momento les aplicaba un ajuste preestablecido con metadatos sobre la autoría de las imágenes.
  2. La purga: Marcar todas las fotos que merecían ser borradas. Aquí también lo hice con las fotos anteriores.
  3. Lo más complicado es añadir las palabras clave a las imágenes, y unificar todas ellas (las antiguas y las nuevas)
  4. En algunos casos también geolocalicé las fotografías y creé algunas colecciones y apilamientos.
  5. Etiquetar algunas imágenes para subirlas o editarlas.
Tabla con el número de fotos por año, antes y después de la purga

Tabla con el número de fotos por año, antes y después de la purga

Gráfica con el número de fotos por año, antes y después de la purga

Gráfica con el número de fotos por año, antes y después de la purga

Y con estos datos no sé qué pasó entre 2007 y 2009, sobre todo en este último año, para ese bajonazo en el número de capturas. Pero es que además he borrado casi la mitad de las fotos de 2009, cuando el promedio está en un 25% de fotos que no pasan el corte (poco exigente que es uno)

Tanto dato, tantas horas de verano sacrificadas y fotos publicadas… pocas. No pierdan la esperanza, un día de estos los sorprendo.