Análisis del álbum digital Saal

En esta entrada analizaré el álbum digital Saal. Hace unas semanas vi una promoción en Instagram que permitía obtener un importante descuento en la compra de un álbum fotográfico a cambio de realizar un análisis del mismo. La empresa es una compañía alemana, Saal, que también ofrece sus servicios en España.

Aviso: En ningún caso ha presionado para condicionar mi opinión.

Esta review consta de los siguientes apartados (puedes acceder a cualquiera de ellos haciendo clic en el índice)

Eligiendo el álbum digital Saal

La empresa ofrece distintos tipos de álbumes digitales (estándar, extragrueso y de cubierta blanda).  Para todos ellos existen diferentes opciones en cuanto al tamaño, acabado (brillo/mate) y número de las páginas. En los dos primeros, también se pueden elegir las características de la cubierta (normal, acolchada o en símil de piel).

Los fotocuadernos son más sencillos, ya que solo podremos elegir las dimensiones y el número de páginas.

Consideraciones sobre los precios

Los detalles de cada uno de ellos se encuentran disponibles en la web y en el software de Saal. Es importante consultarlos porque el precio final dependerá de ellos. La compañía te muestra su catálogo de álbumes mostrando unos precios de referencia, los consabidos “desde … euros”. Estos precios parten del número mínimo de páginas interiores (25) en brillo y cubierta sin acolchar. La modificación de estas características conlleva un cambio en el precio. Por ejemplo, para el tipo de álbum que elegí, las variaciones posibles son las siguientes:

  • Con cubiertas en símil de piel: +18€
  • Con cubierta acolchada: +5€
  • Páginas interiores en mate: -5€
  • Cada par de páginas adicionales: +1€
  • Eliminación del código de barras: +5€ (si bien es cierto que solo mide 8x5mm. Se muestra en las esquinas de la tapa y contratapa traseras)

Álbum digital Saal: Detalle del código de barras

Tanto en la web como el software de diseño, estos precios aparecen desde el principio y se van actualizando sobre la marcha, por lo que no nos encontraremos con sorpresas finales.

Mi elección

Teniendo lo anterior en cuenta, me decanté por este:

  • Álbum digital estándar.
  • Dimensiones: 28×19 (A4 horizontal)
  • Cubierta fotográfica sin acolchar en mate, al igual que las páginas interiores. No eliminé el código de barras.
  • 36 páginas (las contratapas anterior y posterior cuentan como páginas y pueden utilizarse como tales)

El precio de este álbum es de 35,95€, a los que hay que añadir los gastos de envío (4.95€).

Creando el álbum

El álbum puede crearse online o a través de un software. Si bien la página web de Saal es muy completa y ofrece gran cantidad de información útil, su uso para la creación de un álbum no está recomendada porque apenas tiene posibilidades de personalización.

La mejor opción es emplear el software Saal Design que puede descargarse en la web. Está disponible para Windows y Mac.

El programa se abre con un asistente que nos describe y nos permite elegir los diferentes productos, así como sus características.

A continuación, nos toca maquetar el álbum, ya sea desde cero o utilizando algunas de las plantillas existentes.

Para quien no desee complicaciones, las plantillas son la mejor opción, hasta el punto de que las fotos pueden ser colocadas automáticamente, con lo que el proceso duraría apenas unos minutos. Las plantillas incluidas no me han parecido destacables en cuanto a diseño (salvo alguna excepción que se comenta más adelante), por lo que me decidí por la maquetación a mano.

La pantalla de diseño se divide en 5 zonas:

Álbum digital Saal: Software Saal Design

  1. La superior que contiene una barra de menús.
  2. Selección de las imágenes.
  3. Zona de maquetación
  4. Herramientas de diseño (capas, fondos, imágenes prediseñadas y plantillas)
  5. Zona de pedidos (incluye resumen del proyecto y su coste)

Partiendo de la página en blanco el proceso puede ser tan simple como arrastrar la fotografía a la zona que queramos. Incluso trabajando de esta manera podemos beneficiarnos de las plantillas existentes. En mi caso, usé algunas de las plantillas de página del grupo Diseños (simples). Se elige la plantilla y se arrastra a la página deseada. A continuación, se mueve la foto al contenedor de nuestra elección.

Las posibilidades sobre cada imagen son muchas (filtros, bordes, máscaras, etc) pero te aconsejo tener en cuenta estos aspectos:

  • Puedes activar o desactivar la corrección automática de las fotografías. Si las has editado en Photoshop o Lightroom, mejor desactiva la opción.
  • Por defecto, al mover los lados o las esquinas de una imagen, se redimensiona pero sin mantener la proporción original. Hay que hacerlo en cada imagen.
  • Emplea las guías inteligentes y las herramientas de alineación para posicionar las fotografías.

Resumiendo: El programa es muy potente y versátil, lo que permite su uso tanto al que quiere hacer un álbum de la manera más fácil y rápida posible, como para aquel que desea ajustarlo a sus necesidades. Algunos aspectos son mejorables, como el redimensionado no proporcional o el sistema de ayuda, cuya sección propia es muy escasa.

Compartir el álbum

Una vez hemos terminado y enviado el álbum tendremos la opción de compartirlo a través de internet. El sistema ofrece dos opciones: Incrustarlo en una página web o usar un enlace. En ambos, podemos permitir (o no) que el visitante comparta el álbum o incluso que lo compre. Esto sería una buena opción para ofrecer nuestros álbumes como fotolibros, pero el tiempo durante el que está disponible online es limitado (2 meses y medio)

Álbum digital Saal: Compartiendo el álbum onlineÁlbum digital Saal: Compartiendo el álbum online

El programa también te da la opción de previsualizar el álbum en formato PDF. Por defecto, lo genera con una gran (y molesta) marca de agua con el texto «Vista previa». Desde los ajustes puede cambiarse o eliminarse por completo.

Formas de pago

Los pagos pueden hacerse por medio de tarjeta de crédito/débito (MasterCard/Visa) o Paypal.

Envío y embalaje

Plazos de entrega

Una vez finalizado, el software envía los datos a los servidores de Saal, desde donde se procesan. En mi caso los plazos fueron los siguientes:

Álbum digital Saal: Plazos de enntrega

En naranja aparecen los fines de semana, en amarillo otros días festivos (en España). DL = Días laborables.

En la web se indica que el plazo de producción es de 1 a 2 días laborables y el de envío de 3 a 4 días. Haciendo cuentas, la llegada se retrasó un día, lo que no está mal teniendo en cuenta que el pedido fue realizado un sábado y que el lunes 15 era festivo en España (¡y agosto!).

En todo momento se ofrece seguimiento del envío. Mientras es transportado en Alemania por DHL se puede consultar en español en la propia página de Saal. Sin embargo, al llegar a España, el seguimiento tiene que realizarse a través de la página de Correos.

Conviene indicar que envían los productos a las islas, así como a Ceuta y Melilla.

Embalaje

El álbum se manda en un sobre de cartón rígido, en el que se incluían 3 sobres más del mismo material. Dos de ellos contenían muestras de papel y el tercero el álbum en sí que, además, viene envuelto en un material tipo foam y dentro de una bolsa de plástico cerrada. Ningún pero en este apartado.

El álbum digital Saal

Lo primero que destaca al coger el álbum es la suavidad aterciopelada de las tapas mate, que son realmente agradables al tacto. Se siente sólido y compacto. Las uniones entre páginas son perfectas, lo que permite que las fotografías que abarcan dos de ellas no tengan problemas de continuidad. Tampoco hay problemas para abrir el álbum por completo, en un ángulo de 180 grados.

Elegí el acabado mate, tanto para las tapas como para el interior, porque no me gustan los reflejos propios del papel brillo. En ese sentido, el álbum cumple porque no hay reflejos ni marcas de huellas de los dedos.

La definición es muy buena, posibilitando un gran nivel de detalle de las imágenes.

Le toca el turno al color que es, con mucha diferencia, el peor y más importante problema que tiene este álbum Saal. La reproducción del color sobre el papel difiere de manera bastante notoria de lo que puedo observar en mi monitor. Es especialmente evidente en los cielos y las nubes, en los que aprecio tendencia al magenta, que les da un tono más frío. También en los tonos oscuros, por ejemplo, en la portada:

Foto de la portada

Esta es la foto original de la que sale la portada. La arena tiene un tono más amarillento y cálido.

Álbum digital Saal: Portada rígida en mate

En la portada impresa el tono de la arena es distinto a la foto original.

La sensación es que los colores son menos vibrantes y luminosos. El resultado general en este aspecto es decepcionante. Resulta claro que algo falla. Se trata de un tema muy complejo, la gestión del color, ya que implica la calibración del monitor, el uso de perfiles y la correcta comunicación entre distintos dispositivos.

Saal ofrece distintos perfiles ICC para cada producto con los que trabajar en Photoshop y Lightroom. Pero la información que los acompañan podría ser mayor y más asequible para los que no somos profesionales. En mi caso no los utilicé porque no me di cuenta hasta después de haber enviado el álbum.

A posteriori, he realizado pruebas en pantalla de las imágenes del álbum empleando el perfil apropiado en LR y tampoco consigo que haya una correspondencia entre colores. Creo que esto reduce las posibilidades de error a la calibración de mi monitor o a la impresión de Saal.

Me queda la duda de saber si hubiese quedado mejor usando la corrección automática de imágenes, si el papel hubiese sido brillo o hubiese prestado más atención a los perfiles ICC. Aun así, en la foto de referencia y calibración impresa (que se puede descargar y pedir por correo gratuitamente) que acompañaba a mi pedido, sigo viendo esas dominantes magentas.

Conclusiones

Tengo sensaciones encontradas al llegar a este punto. Por un lado, me encanta la seriedad que trasmite la empresa, lo que se plasma en el diseño de una experiencia de usuario estupenda. En cambio, los resultados en la impresión no han sido los que esperaba. Es casi su único fallo, pero es de mucha importancia.

Aspectos positivos

  • La gran variedad de productos disponibles.
  • El software: potente y flexible.
  • La calidad de los materiales.
  • La atención al detalle de la compañía: Se aprecia en su web (impecable versión en español), el software, el envío y el embalaje.

Aspectos negativos

  • La reproducción de color.
  • Algunas opciones del software de diseño podrían ser más intuitivas.

 

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3 comentarios

  1. Carlos Escribano

    Hola, compañero:

    Tengo la impresión de que algo has debido hacer mal, porque yo ya llevo varios foto-álbumes con esta empresa y en todas ellas la gestión del color ha sido óptima. Mi monitor, que es un MacBook Pro, viene con la calibración de fábrica. Lo que te aconsejo es que ajustes los perfiles de Saal-digital, con la configuración que hay a cada uno de estos perfiles y posteriormente, guardes las fotos con el perfil srgb que es el que exige Saal-Digital para los álbumes. Es posible que en la prueba de pantalla notes el los colores algo apagados, pero no te preocupes porque en el álbum van a salir tal y como tú hayas revelado la foto.

    Saludos.

    • Hola Carlos. Gracias por tu comentario. Desde que escribí el artículo he vuelto a usar los servicios de Saal, esta vez usando los perfiles ICC que proporcionan. La reproducción del color es bastante más fiel al original, aunque a veces es tedioso (o complicado) ajustar una foto previamente procesada para obtener los mismos tonos en la copia de la prueba.
      Un saludo.

      • Carlos Escribano

        Hola, Antonio:

        Si has hecho un revelado correcto, normalmente ya no es necesario tener que volver a tocar la foto, para el foto-libro. Como te comenté, bastaría con que la guardaras en srgb, aunque, incluso, esto tampoco es tan relevante. Fíjate, mi primer foto-álbum que hice, ni siquiera tuve en cuenta este aspecto y la verdad que cuando me di cuenta me acojoné, pensando que me vendría una chapuza. ¡Pues no! vino perfecto, y es que según me han comentado otros compañeros, Saal-Digital, corrige estos aspectos a la hora de fabricar el álbum, no se si esto será cierto, pero las fotos vinieron perfectas y las veía en el monitor igual que en el libro.

        No sé con que monitor trabajas, los de Apple suelen ser bastante fiables, aunque no les hayas hecho calibración. Los de windows son un mundo y cada uno, dependiendo del fabricante, vienen mejor o peor calibrados.

        En lo que si que estoy totalmente de acuerdo contigo, es que el redimensionado de fotos que tiene el propio programa de Saal-Digital, es tedioso y cuesta mucho adaptar las fotos al tamaño de la página sin que te recorte algo de imagen. En este aspecto, me gustaría saber como lo haces tú porque salvo que no vuelva a redimensionar la foto en photoshop, no soy capaz de hacerlo con el propio programa de Saal-Digital.

        Un cordial saludo,
        J. Carlos Escribano.

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