Como navegante veterano de la www he tenido que lidiar con las ocurrencias de los responsables de páginas webs para atraer y retener visitas. Nada se antepone al número de visitas, clicks, conversiones y aumento de tráfico. Al carajo la usabilidad y la experiencia de usuario.
A continuación comento algunas técnicas empleadas en internet que me resultan especialmente molestas y repudiables.
Clickbait y titulares sensacionalistas
Son una plaga, están por todas partes: blogs, prensa, redes sociales… buscando picar tu curiosidad y que hagas clic. Créeme, podrás vivir sin saber qué pasó después y sin que te explote la cabeza.
¡Hasta Pitchfork cae en el clickbait!
Artículos sin enlaces
Cada vez más abundan las páginas que usan los contenidos de otras y ni siquiera tienen la decencia de enlazarlas. Los enlaces que hay no salen de la propia web. Hace tiempo escribí sobre uno de estos sitios parásitos.
Ventanas flotantes para que te suscribas
Últimamente hay multitud las páginas, sobre todo en las obsesionadas con el SEO, que te plantan una ventana flotante en mitad de la pantalla para que te suscribas a su newsletter.
Si quiero suscribirme a tu página lo haré a través de RSS o buscando yo el formulario. No hace falta que me molestes con una ventana flotante.
Un ejemplo de ventana flotante
Otro ejemplo, en este caso no es una ventana flotante, sino una sección que se coloca en la parte superior del artículo.
Scroll continuo
Pitchfork te mete sus críticas aunque no quieras. Y además la nota del disco de Tennis es totalmente injusta.
Con lo práctica que es la paginación de los contenidos ¿qué necesidad hay de crear una interminable página vertical que complica la búsqueda de los artículos?
En El Mundo, Hipertextual o Pitchfork retuercen esta práctica aún más. Por ejemplo, en este último, que cuando visitas una página concreta con la crítica de un disco, inmediatamente al final, va mostrándote más críticas, una tras otra. No me interesan, gracias.
Reproducción automática de vídeos
Algunas páginas reproducen automáticamente vídeo o audio. Pocas veces está justificado. Hay una variante -afortunadamente no muy extendida- que es aún más molesta: Después de reproducir un vídeo, el sistema reproduce automáticamente otro que no has solicitado. No hay posibilidad de cancelarlo, solo de esperar a que se inicie y pausarlo, abandonar la página y/o maldecir al lumbreras que tuvo esta idea.
En gris, la ventana con el vídeo y la cuenta atrás para ver a las Spice Girls. Las webs del grupo PRISA adoran bombardearte con vídeos spam.
Artículos relacionados entre párrafos de una entrada
Otros que se empeñan en que leas sus contenidos son los de Gizmodo. No les basta con los artículos relacionados que suelen aparecer al final de un artículo. No, te los tienen que poner también entre sus párrafos, lo que obstaculiza y entorpece la lectura.
Interrumpimos esta lectura para informarles de algo que no le interesa en absoluto.
Entradas completas en la página de inicio
Los gestores de contenidos como WordPress, tienen la opción de mostrar solo una parte del artículo en la portada o página de inicio de una web. En ella normalmente se muestran varias entradas, por lo que es conveniente activar esta opción. Muchas, sin embargo, no lo hacen. Esto ocasiona -si una entrada es extensa- que tengamos que desplazarnos bastante hasta llegar a la siguiente. El caso más extremo que he encontrado ha sido el de Kirai. Su página de inicio es tan larga que me ha sido imposible capturarla por completo. Lo que ves abajo es solo una fracción del total.
Si haces clic verás algo más largo que el miembro del negro del Whatsapp.
Estos han sido solo algunos ejemplos. Seguro que me dejo otras prácticas que molestan más que ayudar al usuario. Si sufres alguna otra, no lo dudes y deja tu experiencia en los comentarios.
[Créditos de las imágenes de cabecera: Dispositivos por Templune + Circle vector created by Alvaro_cabrera – Freepik.com]
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