Tendría que haberlo hecho antes, coincidiendo con la entrada del año nuevo, pero en esta casa pocas cosas se hacen a su debido tiempo.
No hablaré de propósitos porque tampoco los cumplo, sino del estado de los asuntos que se tratan instantes.net.
El blog
El primero de ellos es sobre su propia naturaleza. Me enorgullezco de que sea un diario online, una bitácora, un blog o como prefieras llamarlo. A medida que las redes sociales han monopolizado la interacción entre usuarios más me doy cuenta de sus ventajas frente a las imposiciones de las compañías tecnológicas. Es un tema que algún día trataré con el detalle que se merece.
Pero de forma más particular, estoy satisfecho con la dinámica que se ha asentado en el blog: Una foto (casi) todas las semanas y textos esporádicos, ya sea formando parte del cuaderno de apuntes o tratando con más profundidad algún tema.
Para mi sorpresa, en 2022 conseguí publicar al menos una fotografía cada semana, salvo en nueve de ellas. Tiene mérito porque ha sido el año en el que menos imágenes ha tomado desde 2013. Bendito archivo.
El cuaderno de apuntes se ha consolidado; la reiteración de algunas temáticas está definiendo sus secciones (música, fotografías que me gustan y curiosidades lingüísticas).
Sin embargo, pese a ser el segundo año más prolífico, las visitas a instantes.net han descendido, lo que deja muy claro que los llegan a este blog lo hacen por alguno de los tutoriales o recursos disponibles para descarga. Ni las fotos ni los textos interesan.
Las redes
Comencé el año pasado borrando mi cuenta de Twitter, aunque sigo entrado para informarme en algunas ocasiones o buscar la opinión de gente que aprecio. No tener la posibilidad de interactuar me ha ahorrado mucho tiempo y disgustos. Ahora, siendo propiedad del psicópata de Musk, ni me planteo volver.
Con Instagram me pasa casi lo mismo, entro de vez en cuando para salir espantado por los intentos de la empresa por atraparte en un pozo de estupideces y de malas experiencias para el usuario. Y es una lástima porque hay contenido fotográfico muy interesante.
De igual modo, mi cuenta de Flickr sigue activa, pero sin imágenes nuevas desde hace años. El nivel de la mayoría de fotógrafos allí presentes es tan bajo como el de los foros de Dpreview.com.
Las cámaras
Sigo a la espera de encontrar mi cámara ideal, que sea la excusa para lanzarme a nuevos proyectos. Con las cámaras que mantengo me voy apañando, pese a que hay momentos en los que echo de menos tener una máquina con la tecnología actual.
He experimentado (y sigo) con fotografía química muy modestamente. Me ha faltado tiempo para compartir los resultados que he obtenido.
Pero, como habéis visto, eso poco importa.
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